#MAKMAArte
Artistas en residencia 2023-2024
Casa de Velázquez
Paul Guinard 3, Madrid
La Casa de Velázquez, sede de la Academia de Francia en Madrid, acoge en su 94ª promoción en residencia a quince artistas de hasta ocho nacionalidades diferentes. Creación e investigación suponen los dos principales pilares que fundamentan esta iniciativa cultural, que permitirá a los residentes, durante este ejercicio 2023-2024, establecer diálogos e intercambiar ideas con otros artistas en el idóneo entorno que supone la Casa de Velázquez y los talleres que albergan sus jardines.
La presente edición tiene como madrina a Isabel Muñoz, Premio Nacional de Fotografía 2016, que les acompañará a lo largo de eventos tales como la Jornada de Puertas Abiertas o la inauguración de la exposición ‘Itinérance’. Esta exposición colectiva se realiza anualmente y presenta los trabajos de los artistas residentes una vez finalizada su estancia.
Si bien todavía queda lejos, se augura prometedora, pues los proyectos de los artistas seleccionados cuentan con una gran multidisciplinariedad que ya nos permite entrever el enriquecedor futuro del arte contemporáneo. Composición musical, cine, videoarte, escritura, grabado, pintura, escultura y cómic se reúnen bajo el techo de la Casa, aunándose algunas de ellas, en ocasiones, en una misma pieza.
La obra de Assoukrou Aké (1995, Costa de Marfil) parte del arte estatuario africano para deconstruir la carga mágica que conferimos a objetos digitales. ‘Animique’ constará de filmaciones, pinturas, collages mixtos y escultura performativa para abordar, a través de ellos, el principio del objeto animado, enlazando, asimismo, historia y biografía.
Daniel Alvarado Bonilla (1985, Colombia) está trabajando en un proyecto titulado ‘Vestigios – Canto de las moscas’, donde trata de evocar el ritual y el lamento a partir de un conjunto de voces femeninas, instrumental y electroacústico. El artista parte de la poeta María Mercedes Carranza y el folclore colombiano para preguntarse acerca de la representación musical de la pena de la guerra.
Bahia Bencheikh-El-Fegoun (Argelia, 1976) aborda, a través del cine, políticas de visibilización y memoria. En su actual proyecto, ‘Sorgina/Witch’, reflexiona en torno a la historia olvidada de las mujeres acusadas de brujería, condenadas, torturadas y ejecutadas. Este ensayo documental parte de los estudios feministas para hacer dialogar la figura medieval y contemporánea de la brujería, junto a un estudio mitológico y ocultista que ya inició en su residencia en Villa Albertine, en Estados Unidos.
También en el cine se especializa la obra artística de Faouzi Bensaïdi (Marruecos, 1967). Bensaïdi, director y guionista, se encuentra desarrollando un largometraje con el Madrid de los años 30 de telón de fondo. El filme tratará la historia de un joven marroquí que se alistará junto al bando franquista durante la Guerra Civil para darse cuenta de que entre él y el enemigo no hay diferencia, generando, con ello, una emotiva historia de un despertar de consciencia.
En el ámbito de la escultura, encontramos la obra de Vincent Cardoso (Francia, 1994). El artista trabaja la cuestión del poder, autoridad y legitimidad de la escultura en el espacio público, a través de piezas sincréticas inspiradas por su lectura de Lorca y la violencia macabra de la escultura barroca española. Cuestiona, con su producción artística, la actualidad de los códigos del barroco en relación con las estructuras de dominación.
Nicolás Combarro (España, 1979) trabaja en un proyecto titulado ‘La matière de l’amnésie’, con el que reflexiona sobre la represión franquista en diálogo con otros contextos paralelos como el de Portugal o Francia. De este modo, a través de su obra asistiremos a la recuperación de la memoria histórica, de campos de concentración, cárceles políticas y campos de trabajo que parecen haber quedado en el olvido.
Bastien David (Francia, 1990), aborda la cuestión de la vida sonora en su proyecto ‘PULSAR’. A través del uso poético derivado de las pulsaciones de objetos astronómicos, el artista explora la fractalidad del sonido, unas frecuencias de alta intensidad mediante las que conecta el arte de lo sonoro con las ciencias celestes. Este trabajo experimental nos permitirá encarnar la escucha del mundo sonoro minúsculo, y será presentada en la Cité de la Musique – Filarmónica de París.
De vuelta a las artes visuales, encontramos la práctica de Manon Delarue (Francia, 1991), un proyecto de cómic que se articula en torno a la construcción del deseo. Partiendo de las investigaciones de Judith Butler, Delarue busca infundir una dimensión sensorial a sus cómics, cuestionando las condiciones socioculturales y políticas que configuran nuestras vidas. Las figuras de Jesucristo, el toro y el gladiador serán el hilo conductor que nos guiarán a través de su planteamiento sobre el modo en que la cultura determina nuestras fantasías.
Olivia Funés Lastra (Argentina, 1995) recurre a la poesía y pensamiento de María Zambrano para entrelazar pintura textil y texto en su proyecto ‘Claros del bosque’. Poesía y pensamiento, percepción y resistencia, olores y celosías articularán su trabajo con el que tratará de responder a una pregunta con tintes biográficos: ¿cómo contribuye una vida errante y entre distintos idiomas a conformar una obra poética viva?
La autenticidad del día a día también se verá capturada por las obras de Bilal Hamdad (Argelia/Francia, 1987). Su proyecto abordará situaciones cotidianas auténticas con una mirada diferente, a través del cuestionamiento sobre la historia común de España y el mundo árabe. Un proyecto paralelo a su reinterpretación de la ‘Ofelia’ de Millais, con la que habla sobre la cuestión de la inmigración.
Gala Hernández López (España, 1993), candidata por ‘La mecánica de los fluidos’ al mejor cortometraje documental en los Premios César 2024, que otorga la Academia de las Artes y Técnicas del Cine de Francia, explora con su docuficción ‘hold on for dear life’ la criptocomunidad en España y sus vínculos con la crisis financiera de 2008.
Tereza Lochmann (República Checa, 1990) trabaja en un proyecto de grabado titulado ‘Tauromachie intérieure ou le combat des corps’, a través del cual abordará la confrontación hombre-animal en el ritual de la tauromaquia, la transposición del cuerpo humano y animal en las fiestas populares y el tratamiento de ambos en el imaginario de Goya y Buñuel. La artista busca, con ello, replantear la relación hombre-animal no desde la ruptura, sino desde la comunicación.
Camille Zéhenne (Francia, 1985) desarrolla un ensayo documental en el que se pregunta por los neoconquistadores. Establece, en él, una reflexión en torno al dinero y el capitalismo como motor de conquista no solo de territorios, sino también de personas, poder y sueños. Trata de cuestionar el mito del oro para ofrecer un retrato de mundo occidental.
Marta Pérez-Campos (España, 1990), artista becada por la Diputación Provincial de Zaragoza, aborda la cuestión de la inteligencia artificial en su trabajo ‘Goodbye, World!’, donde trata de imaginarse cómo pensaría una IA llamada Bleby si tomase conciencia en nuestro mundo actual. La artista estetiza el mundo de los lenguajes programáticos a través de estas reflexiones y los escenarios imaginados por esta supuesta IA creando una instalación con un fuerte componente visual y cromático.
La obra de Regina Quesada (España, 1978) –artista becada por el Ayuntamiento de València a quien tuvimos ocasión de entrevistar, junto a Claude Bussac (directora de Estudios Artísticos de Casa de Velázquez), a principios de noviembre–, ‘Piedras: sobre una genealogía del territorio’, nos lleva de vuelta a la Casa de Velázquez, a los impactos de bala que en ella todavía se aprecian de la Guerra Civil y a cómo estos conectan a través de la piedra con los alineamientos de Carnac. Busca con sus dibujos establecer una suspensión espaciotemporal inspirada por el trabajo de Lucio Fontana, que atraviesa el papel creando una conexión donde el tiempo no tiene fin.
Bajo la dirección de Nancy Berthier (directora de la Casa) y de Claude Bussac, el programa contribuye a tender puentes y estrechar lazos no solo en el ámbito cultural español y francés, sino proyectando una dimensión internacional de mayor alcance.
Así, la Academia de Francia en Madrid establecerá proyectos con otras instituciones nacionales (como las becas de residencia en colaboración con el Ayuntamiento de València y la Diputación de Zaragoza o la nueva beca de residencia junto al Ayuntamiento de Málaga) e internacionales (como el festival ¡Viva Villa! en colaboración con la Villa Medici en Roma, la Villa Kujoyama en Kioto y la Villa Albertine en Estados Unidos).
Asimismo, importantes instituciones nacionales e internacionales forman parte de la red de colaboradores de la Casa de Velázquez, entre los que se encuentra la revista MAKMA, para promocionar el trabajo de los artistas residentes.