Nacho G. Velilla y Carmen Machi (‘Mañana es hoy’): «La emotividad y el dolor están en primer grado. Por supuesto, pasado todo por la máquina de la comedia»

Nacho G. Velilla, Carmen Machi y Javier Gutiérrez

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‘Mañana es hoy’, de Nacho G. Velilla
Con Carmen Machi, Javier Gutierrez, Asier Rikarte, Carla Díaz, Antonia San Juan, Elena de Lara, Mina El Hammani, Pepón Nieto, Candela Pradas, Silvia Abril y Marta Fernández Muro
108′, España | Aparte Films, Atresmedia Cine
Amazon Prime Video

Prime Video presenta la primera película original española de Amazon, ‘Mañana es hoy‘, una creación del director español Nacho. G Velilla estrenada en la plataforma el pasado 2 de diciembre de 2022.

Carmen Machi y Javier Gutiérrez trabajan juntos por primera vez en este filme dando vida a un matrimonio tradicional de la España noventera, encarnando los papeles de Pilar y José Luis (Pepe), cuyos dos hijos –Rodrigo (Asier Rikarte), un adolescente descubriéndose a sí mismo y a su sexualidad, y Lucía (Carla Diaz), una joven enamorándose por primera vez– se enfrentan a un padre sobreprotector y a una madre cansada de llevar las riendas.

Intentando escapar de la monotonía, la familia Gaspar aprovecha el verano para irse de vacaciones a un pequeño pueblo de la costa mediterránea. Tras una gran discusión entre Lucía y su padre, ella escapa con Charly (Gabriel Guevara), su novio y persona non grata para Pepe, y el resto de miembros de la familia, pese a todo, deciden seguir disfrutando de un tranquilo día de playa.

Pilar, Pepe y Rodrigo, subidos en un patinete acuático, son sorprendidos por una fuerte tormenta. Pasado el temporal, retornan a la orilla y progresivamente se dan cuenta de que algo extraño ha sucedido: el fenómeno meteorológico los ha transportado al futuro, viajando en el tiempo de 1991 a 2022.

Apelando a temas íntimos y personales como el amor a la familia, la pérdida de un ser querido o la incomprensión de los progenitores, pero “partiendo de unas premisas fantásticas”, Nacho G. Velilla, inspirado en el cine de Robert Zemeckis, Frank Capra y Vittorio de Sica, crea una comedia con puntos dramáticos (una especie de melodrama) que sumerge al espectador en una doble realidad.

“Es un guion que nace un poco del Nacho adolescente que consumió ese cine: ‘Los Goonies’, ‘Regreso al futuro’… Pero en España no se ha hecho nada similar nunca, por la ingente cantidad de dinero necesaria para producir una película con estas características», afirma el cinesta. «Amazon estaba buscando hacer su primera película original en España y yo justo llevaba ya un tiempo escribiendo este guion».

“La historia la hemos basado en descontextualitzar a unos señores y llevarlos para que examinen el contexto actual a través de unos ojos limpios de los 90, que no conocen los móviles, el papel de la mujer, la sociedad multicultural”. Para crear esta situación con auténtica veracidad se necesitan, como afirma el director, “actores honestos”, ya que “es muy fácil hacer una mirada buscando gags y joder la honestidad de la situación”, propósito del que se aleja esta producción.

Nacho G. Velilla reconoce que pensó desde un inicio en Carmen Machi y Javier Gutiérrez para interpretar estos papeles protagonistas, en tanto que “¿cuántos actores pueden pasar en una misma escena de una situación cómica a hacer un giro dramático y saquen un gancho de suspense?”, se interroga retóricamente. “Transitar por muchos géneros en una misma escena es muy complicado y ellos son los mejores».

«La emotividad y el dolor están en primer grado. Por supuesto, pasado todo por la máquina de la comedia, mezclando diferentes subgéneros», afirma una Carmen Machi que muestra la gratitud que siente por formar parte de un proyecto tan personal para Velilla, describiéndolo como «una propuesta diferente y por tanto, más personal, con una base sólida de lo que él domina como nadie».

Cómo no hablar también de la cuidada estética que posee la película, inspirada en la España de los 90, sin faltar ninguno de los emblemáticos objetos que caracterizaron esa época: pantalón de talle bajo, mullets como peinado, chupas de cuero, cabinas telefónicas, fotografía analógica… Todo un ajuar de detalles que sumergen acertadamente la diégesis en aquella realidad.

Acompañando todo este aesthetic, nos encontramos también acentuados comportamientos y comentarios retrógrados a ojos del espectador contemporáneo y propios de la sociedad de entonces. De este modo, la película refleja el paso del tiempo y el cambio de actitud y mentalidad durante las tres últimas décadas.

“Documentándonos, nos dimos cuenta de que no habíamos sido plenamente conscientes de lo que hemos cambiado como sociedad: de lo analógico a lo digital, la forma de relacionarnos, de abordar las noticias de actualidad, el papel de la mujer”, apunta Velilla. “Nosotros trabajamos con actores de otra generación y el 90 % de las cosas los dejaban ojipláticos, les parecía realmente de ciencia ficción”, recuerda Machi.

«Para configurar la gama cromática de los 90, utilizamos ocres con puntos azules, y para reproducir la actualidad, lo hicimos al revés: gama azul con puntos ocres», matiza el director acerca de un trabajo de arte que permite «que el espectador no sea consciente de esta manipulación mediante filtros, pero sí que sabe que está viviendo realidades diferentes».

No podemos pasar por alto tampoco la banda sonora, uno de los elementos estrella en la formación de una película. “Recurrimos a temas emblemáticos y que habían dejado huella en mí», asevera Velilla, tanto de Héroes del Silencio –cuyo ‘Entre dos tierras’ atesora un papel decisivo en el desenlace de la película– o de Golpes Bajos. «Eso nos llevó a plantear cómo sonaría ‘Malos tiempos para la lírica’ en 2022”.

Juanjo Javierre, compositor y supervisor musical, pensó en Alizzz, uno de los mejores productores musicales en el panorama español, y fue este el que propuso a Amaia para interpretar la versión actual de un clásico de los 80. Siguiendo con el ítem de que el papel del hombre y la mujer había cambiado, “decidimos que interpretará la canción una voz femenina, que tuviera esa lírica que tiene la canción original”, especifica Nacho G. Velilla.

Todo en esta película está hilado y tiene un sentido y un porqué, incluso el apellido de la familia protagonista: Gaspar. Y es que, como desvelaba el director, «todos creemos que la primera máquina del tiempo en la literatura la hizo H. G. Wells, pero al empezar a investigar descubrimos que había un escritor español que se llamaba Enrique Gaspar, que en el año 1887 publicó ‘El anacronópete’ [publicada ocho años antes que ‘La máquina del tiempo’ de Wells], entorno a un cofre que hacía viajar a unos españoles en el tiempo”, concluye Nacho G. Velilla.

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