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‘Hambre’, de Sitisiri Mongkolsiri
Con Chutimon Chuengcharoensukyingsoon, Nopachai Chaiyanam y Gunn Svasti Na Ayudhy
130′, Tailandia | Song Sound Production, 2023
Netflix

Hambre’ ha llegado a la parrilla de Netflix, el pasado 8 de abril, sin hacer demasiado ruido, aunque en tan solo 48 horas ha conseguido situarse en la lista de los ‘Top 10’ de la plataforma. Se trata de un thriller tailandés dirigido por Sitisiri Mongkolsiri y protagonizada por Chutimon Chuengcharoensukyingsoon y Nopachai Chaiyanam. La trama se cocina a fuego lento, y el sabor, la alta cocina y el juego de poderes se contraponen a la imagen de una cocina familiar en el bullicio de la capital.

En pantalla vemos a Aoy, una joven cocinera al frente del restaurante familiar de fideos salteados en un barrio tradicional de Bangkok. Su vida cambia radicalmente cuando recibe una oferta de trabajo en el afamado restaurante Hunger, caracterizado por la cocina de lujo y con el despiadado chef Paul al frente.

Aoy pronto vive en su propia piel el lado oscuro de la alta cocina y de los personajes que conforman la plantilla del Hunger y sus pretenciosos clientes. Es una película que juega continuamente en los extremos: el hambre frente al derroche, la familia frente a la fama y el poder contra el amor.

Hambre

En ‘Hambre’ se entremezclan tres ingredientes principales: la cocina, el amor y la clase social. Este último filme tailandés no tiene nada que envidiar a los thrillers gastronómicos que se han visto en la gran pantalla durante los últimos años. Un ejemplo lo encontramos en ‘Hierve’, estrenada en enero de 2022 y dirigida por Philip Barantini, con Stephen Graham en el papel protagonista.

Hierve’ es una experiencia inmersiva en la cruda realidad de los fogones. Se trata de un largometraje de una hora y media grabado en plano secuencia y que sigue los pasos acelerados de un chef durante un servicio de cocina intenso en uno de los restaurantes de moda londinense. Barantini no busca la belleza de los platos sabrosos que se puede encontrar en ‘Hambre’, sino que traslada al espectador a la angustia de un servicio de sábado noche.

En noviembre del año pasado llegó a los cines ‘El menú’, dirigida por Mark Mylod y con el espíritu intimista que desprende Anya Taylor-Joy en el papel coprotagonista. El filme estadounidense se sitúa al otro lado de la experiencia gastronómica: en el papel del comensal.

En escena, una pareja viaja a una isla privada para comer en uno de los restaurantes más exclusivos del momento para degustar una experiencia culinaria única que termina por convertirse en una pesadilla de lo más excéntrica. La película resulta ser una crítica al elitismo de la alta cocina, una experiencia inquietante donde los platos se pueden saborear a través de la pantalla.

A pesar de este nuevo boom del thriller gastronómico, este tipo de cine no es una tendencia reciente. Encontramos decenas de filmes que se han convertido en hitos gastronómicos desde principios de la década de los 90: ‘Tomates verdes fritos’ (Jon Avnet, 1991), ‘Deliciosa Martha’ (Sandra Nettelbeck, 2001) o, incluso, ‘La cena’ (Ettore Scola, 1998). El buen comer y una mesa compartida ha sido (y lo es a día de hoy) uno de los grandes fetiches de los directores de cine, aunque en los últimos años la mirada se ha vuelto más cruda.

Afortunadamente, en las plataformas de streaming encontramos todo tipo de gastronomía, desde la maravillosa Julia Roberts en ‘Come, reza, ama’ (Ryan Murphy, 2010) disfrutando del sabor de la vida en Italia, hasta las escenas semieróticas de la preparación, decoración o degustación de esa comida que se convierte en una obra de arte en ‘Hambre’.