‘Ultra Dinámica’, de Felipe Pantone y Demsky
Galería Mr. Pink
C / Guillem Castro, 110 . Valencia
Hasta el 7 de febrero

La actriz Gwyneth Paltrow y su novio Chris Martin han comprado esta semana una obra de Banksy, el más famoso graffitero, por medio millón de euros. Al cantante Justin Bieber le dio recientemente por pintar en el muro de una calle durante su gira por Australia, en un país que pena con siete años de prisión a quien ejerza esta práctica callejera. Ya hay hasta certámenes de graffiti, como el de Linares, y espacios de solera, como la pionera Tate Modern de Londres, que acogen exposiciones dedicadas al arte urbano. ¿Estamos ante un boom del graffiti? ¿Ha pasado de ser un “acto vandálico” a convertirse en arte que cotiza al alza? ¿Ha dejado de tomar a las paredes de la ciudad como exclusivo lienzo de su práctica artística, para ocupar las paredes más prestigiosas de galerías y museos?

Obra de Felipe Pantone para la exposición 'Ultra Dinámica'. Imagen cortesía de Mr. Pink
Obra de Felipe Pantone para la exposición ‘Ultra Dinámica’. Imagen cortesía de Mr. Pink

La galería Mr. Pink no pretende responder a estas preguntas, pero sin duda las suscita con su exposición Ultra Dinámica. Dos de los más pujantes graffiteros valencianos, Felipe Pantone y Demsky, intervienen en cuatro paredes de la sala, para dejar constancia de la efervescencia del arte urbano en los últimos tiempos. Aunque Pantone precisa: “El graffiti es un movimiento de hace 40 años y se ha empezado a valorar ahora, quizás porque no quedaba más remedio”. Al igual que distingue entre graffiti y arte urbano. El primero es “más cabrón, de nosotros para nosotros, muy hermético y cerrado”. El segundo, “se ha vuelto muy complaciente, más blando; el que gusta a las madres”.

Una de las obras urbanas de Felipe Pantone. Imagen cortesía de Mr. Pink.
Una de las obras urbanas de Felipe Pantone. Imagen cortesía de Mr. Pink.

PUNTO DE LOCURA

Demsky no tiene tan clara la distinción. “El graffiti es una manera de expresión, sin fin lucrativo”. Del arte urbano dice que no lo ha llegado a comprender del todo. Eso sí, aclara que, en todo caso, “el arte no conlleva los riesgos que tiene el graffiti”. Quizás por estos riesgos que asume el graffiti, es por lo que Demsky piensa que se trata de una práctica “atractiva” en tanto resulta “algo ilegal”. Lo cual explicaría a su vez las disparatadas cifras pagadas por algún Banksy, tal y como ha sucedido con la reciente subasta de su globo a modo de corazón lleno de tiritas que ha costado a Gwyneth Paltrow y su novio 500.000 euros. “El arte en general tiene este punto de locura”, remacha Pantone.

Obra de Pantone y Demsky en Ucrania. Imagen cortesía de Mr. Pink.
Obra de Pantone y Demsky en Ucrania. Imagen cortesía de Mr. Pink.

La propuesta que Pantone y Demsky trasladan al interior de la galería Míster Pink sigue los dictados del Manifiesto Ultradinámico redactado por el propio Pantone y secundado por Demsky. Los 15 puntos del documento siguen cierta estela del movimiento futurista de Marinetti, sobre todo allí donde se subraya la importancia de la carrera, del salto mortal, de la eterna velocidad omnipresente. Y aunque el “cambio agresivo”, para violentar la “disolución de la tradición”, es elemento nuclear de lo Ultradinámico, el manifiesto de Pantone no llega a proclamar “la bofetada y el puñetazo” con el que Marinetti llegaba a “glorificar la guerra” y el “desprecio por la mujer”.

TIEMPOS EFÍMEROS

Lo que sí destaca Felipe Pantone es que el graffiti “es la máxima expresión de estos tiempos efímeros”. De ahí su apuesta por el Arte Cinético, el dinamismo, el movimiento y la atracción por esa velocidad omnipresente de los tiempos actuales. Un tiempo coherente, según recoge en su manifiesto, con la modernidad líquida (y aquí resuena Bauman), con sus relaciones transitorias y su condición desechable y efímera. Pantone se encarga de incorporar todas esas ideas a los dos murales con los que interviene las paredes de Mr. Pink, mientras Demsky hace lo propio en otra de las paredes, al tiempo que realiza una escultura de hierro. Se trata, como figura en el manifiesto, de “la incorporación en el espacio pictórico de la incertidumbre y la sorpresa”.

Obra de Pantone en Taiwan. Imagen cortesía de Mr. Pink.
Obra de Pantone en Taiwan. Imagen cortesía de Mr. Pink.

La reivindicación del graffiti como arte controvertido, en tanto busca apropiarse de la ciudad desde el anonimato y romper los parámetros del mercado sin renunciar a lo crematístico, hace de Ultra Dinámica un magnífico escaparate. Un escaparate que no alcanza las dimensiones de París, Berlín o Amsterdam (“yo vivo de lo que hago fuera”, dice Pantone), pero que sin duda dinamiza el espacio artístico.  Graffiti a toda pastilla, en tiempos de aceleración compulsiva.

Detalle de la obra de Felipe Pantone para 'Ultra Dinámica'. Imagen cortesía de la galería Mr. Pink.
Detalle de la obra de Felipe Pantone para ‘Ultra Dinámica’. Imagen cortesía de la galería Mr. Pink.

Salva Torres