Premio Internacional de Carteles MAKMA
‘Comunicación/Incomunicación’
Sala Parpalló
Museu Valencià de la Il·lustració i la Modernitat (MuVIM)
Quevedo 10, València
Hasta el 28 de febrero de 2021
Un rodillo con letras sin sentido impresas aparece detenido ante un plano dibujado a lápiz y trazado parcialmente con pequeños clavos. La tensión entre el avance del rodillo y esa superficie claveteada es la forma que han tenido la valenciana Ana R. Leiva y el madrileño Iván Araújo (colectivo Cuatrohilos) de transmitir la comunicación e incomunicación que figuraba como lema del Premio Internacional de Carteles MAKMA. Su obra, titulada ‘Intersecciones’, ha logrado el primer galardón dotado con 5.000 euros, en una convocatoria a la que se han presentado un total de 628 carteles.
Dariana Guevara y Jorge Rodríguez Chacón (Madrid), de Estilo Compadre, y Concha Ros y Ana Pastor (València), han obtenido los dos accésits de 1.000 euros cada uno, que entrarán a formar parte, junto al ganador y otros 87 finalistas, de la exposición que a mediados de diciembre acogerá la Sala Parpalló del MuVIM.
Artistas de España, Italia, Francia, Letonia, Rumania, Cuba, Colombia, Venezuela, México, Chile, Costa Rica, Ecuador, Argentina, Uruguay, Brasil y Estados Unidos, han optado al premio que describía el cartel como mapa y territorio ilustrado de las contradicciones humanas.
El jurado compuesto por Óscar Mariné, Premio Nacional de Diseño 2010; el vicerrector de Cultura de la Universitat Politècnica de València, José Luis Cueto; la vicepresidenta de la Associació Valenciana de Crítics d’Art (AVCA), Irene Gras; la diseñadora gráfica y artista visual, Marta Negre; la ilustradora Carla Fuentes; el director del MuVIM, Rafael Company, y el director de MAKMA, Salva Torres, ha destacado el alto nivel de las obras presentadas, así como la heterogeneidad de estilos y propuestas temáticas, algunas de ellas haciéndose lógicamente eco de la pandemia que todavía padecemos por la covid-19.
A juicio de Mariné, en calidad de presidente del jurado, el éxito de la convocatoria no hay que medirlo tanto por la gran cantidad de carteles enviados, “que también”, sino por “la imaginación, el talentoso manejo de las herramientas gráficas propias del cartel y la reflexión a la que nos convocan la mayoría de los trabajos, ilustrando sin duda las contradicciones humanas, referidas en la convocatoria, y el igualmente complejo tejido social en el que nos encontramos los ciudadanos del mundo globalizado”.
“Tratándose de una convocatoria de naturaleza abierta y estando enfocada tanto a nivel nacional como internacional, las respuestas al tema planteado han sido muchas y muy diversas, a la par que enriquecedoras”, destaca Gras. Entre los cientos de obras presentadas, “hay desde propuestas de un corte más gráfico, a ilustraciones elaboradas a mano y digitales, pasando por otras pictóricas, de collage, fotografía o composiciones tipográficas”, resalta Negre.
La iniciativa de MAKMA, revista de artes visuales y cultura contemporánea, viene a incidir en el hecho de que la función social del cartel no ha prescrito. Como bien apunta Glòria Tello, la diputada con la competencia sobre el MuVIM en el seno del Área de Cultura de la Diputación de València, «bien sea en formato digital, bien sobrepuesto a las paredes u otros elementos del espacio urbano, el cartel sigue formando parte de nuestras vidas, sigue comunicándonos, convocándonos e interrogándonos».
Además, conviene recordar que el MuVIM esgrime una dilatada trayectoria en la exhibición de carteles, hasta el punto de que dicha área de actuación es considerada prioritaria por el centro desde hace años.
Así lo destaca el propio director del MuVIM, Rafael Company, al rememorar cómo en ocasión de la gran exposición ‘La modernitat republicana a València’, programada en el año 2016, «buena parte de los contenidos lo constituían obras de cartelistas tan destacados como Arturo Ballester, Josep Renau, Lluís Dubón o Manuel Monleón».
Y Amador Griñó, jefe de exposiciones del museo, incide también sobre la cuestión afirmando “que gracias a la exhibición de noventa carteles de la convocatoria del Premio Internacional de Carteles MAKMA, los visitantes del MuVIM tendrán una oportunidad más de acercarse a un formato que conocen bien y valoran enormemente”.
Carla Fuentes apunta que le ha «sorprendido la cantidad de estilos diferentes que se han presentado, desde la ilustración, al collage, pasando por el diseño gráfico y la tipografía», resaltando la dificultad de la selección y elección de los ganadores, porque «había mucho interesante donde elegir».
Para José Luis Cueto, debemos felicitarnos por esta iniciativa de convocar un concurso internacional de carteles, puesto que, a su juicio, «sigue siendo necesaria esa ‘función social’ que siempre reivindicó Renau». «Tenemos grandes ejemplos de artistas y diseñadores en este campo y viene a mi memoria de inmediato una frase que escuché al inolvidable y lúcido Paco Bascuñán: ‘Un cartel es un grito en la pared’. No se puede decir mejor ni de manera más (audio) visual. Además, siguen haciendo falta esas voces», añade.
Salva Torres, director de MAKMA, señala, por su parte, la oportunidad, “que no oportunismo”, que un premio de carteles como este ofrece a la sociedad, representada por sus artistas, en un momento histórico como el que estamos viviendo. “Si bien esta es una convocatoria sobre la que llevábamos tiempo trabajando, la cruda realidad se antoja ahora un motivo de mayor calado para reflexionar en torno a la comunicación e incomunicación en el paradójico panorama del tiempo globalizado”, añade.
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