CaixaForum

#MAKMAArte
‘Espejos. Dentro y fuera de la realidad’
Comisario: Josep Miquel del Campo
Asesoramiento: Museo de Matemáticas de Cataluña (MMACA) e Instituto de Ciencias Fotónicas (ICFO)
CaixaForum València
Ciutat de les Arts i les Ciències
Eduardo Primo Yúfera 1ª, València
Del 4 de octubre de 2024 al 12 de enero de 2025

CaixaForum València se mira a sí misma a través de los múltiples espejos recogidos en su exposición precisamente titulada ‘Espejos. Dentro y fuera de la realidad’. Lo hace fiel a su principio de ofrecer montajes expositivos al público con la doble finalidad de generar “una experiencia lúdica y educativa”, tal y como suele repetir Álvaro Borrás, director de la entidad cultural.

Para ello, lo que hace en esta ocasión es, empleando las palabras del escritor francés Stendhal, abrirse de dentro hacia fuera como si estuviéramos frente a un extenso libro que se despliega ante nuestros ojos al modo de “un espejo que se pasea por una gran avenida”.

Una avenida en la que, si bien se reflejan un sinfín de imágenes acerca del mundo y de nosotros mismos, también da pie, siguiendo en esto al filósofo Lluis Vives, a traducir tan fragmentado imaginario en fructíferos pensamientos: “No hay espejo que mejor refleje la imagen del hombre que sus palabras”.

Una joven toma imágenes de sí misma reflejadas en una de las secciones de la exposición ‘Espejos. Dentro y fuera de la realidad’. Imagen cortesía de CaixaForum València.

Y es así, aunando espejos y explicaciones sobre los mismos desde la física y la matemática, como la exposición comisariada por Josep Miquel del Campo, con el asesoramiento de Museo de Matemáticas de Cataluña (MMACA) y del Instituto de Ciencias Fotónicas (ICFO), permite al espectador ir descubriendo lo que apuntó la escritora Ana María Matute: “No debemos olvidar que lo que el espejo nos ofrece no es otra cosa que la imagen más fiel y, al mismo tiempo, más extraña de nuestra propia realidad”.

Por eso es una afortunada elección plantear la muestra tomando como referencia el universo de Alicia creado por Lewis Carroll, mezcla de ingenua percepción de la realidad y de sorprendente perplejidad ante la misma. Valga este diálogo entre el propio creador y su criatura, recogido en la exposición, para acercarse al espíritu dual que atraviesa el conjunto expositivo.

“Lewis Carroll le dio una naranja a Alicia y le preguntó en qué mano la tenía. Cuando ella respondió ‘en la mano derecha’, la invitó a ponerse frente a un espejo y le preguntó en qué mano tenía la naranja la niña del espejo. ‘En la mano izquierda’, contestó perpleja. ‘¿Y cómo se explica eso?’ -cuestionó Lewis-. ‘Si yo estuviera al otro lado del espejo, ¿no es cierto que la naranja seguiría estando en mi mano derecha?’. ‘¡Bravo pequeña Alice!’, exclamó Carroll”.

Groucho Marx, en la película ‘Sopa de ganso’, fotograma incluido en la exposición ‘Espejos. Dentro y fuera de la realidad’, en CaixaForum València.

‘Espejos. Dentro y fuera de la realidad’ se formula siguiendo la senda abierta por Alicia ‘A través del espejo (Y lo que Alicia encontró allí)’, por señalar el título completo de la novela de Carroll que vino a cerrar, desde otra óptica, lo apuntado en su anterior ‘Alicia en el País de las Maravillas’. Un ‘dentro y fuera de la realidad’ que el poeta Paul Éluard entendió de la siguiente manera: “Hay otros mundos, pero están en este”.

Tanto Álvaro Borrás como Josep Miquel del Campo coincidieron a la hora de señalar esta doble vía exploratoria: “Por medio de los espejos ofrecemos una visión alternativa de la realidad”, afirmó el primero; “la exposición cuenta con una base científica, pero está trufada de poesía, literatura y cine, porque el espejo se utiliza mucho en el cine para ver el alma del actor”, subrayó el segundo.

De ahí las referencias culturales de la muestra, con citas de escritores y fotogramas de algunas películas, como ‘Sopa de ganso’ (1933), de Leo MacCarey, en el que se ve a un perplejo Groucho Marx mirándose a sí mismo en un espejo, o ‘El circo’ (1928), de Charles Chaplin, en una imagen cómica en la que se ve al propio Chaplin rodeado de espejos.

Álvaro Borrás (izquierda) y Josep Miquel del Campo, en el túnel caleidoscópico de la exposición ‘Espejos. Dentro y fuera de la realidad’. Imagen cortesía de CaixaForum València.

Borrás empleó la famosa frase del científico español Santiago Ramón y Cajal, Premio Nobel de Medicina –“Al carro de la cultura le falta la rueda de la ciencia”- para sustentar la necesidad de unir ambas ramas del saber a la hora de adentrarse en la realidad propuesta: “Queremos despertar vocaciones científicas, que el público pueda consolidar a través de emociones y experiencias”.

Del Campo se refirió a la “ley de reflexión” que rige el funcionamiento de los espejos, según la cual, “si un rayo incide sobre la superficie” de los mismos “formando un cierto ángulo con la vertical, saldrá reflejado exactamente con el mismo ángulo”. Una ley de la reflexión que, precisamente siguiendo la doble óptica de la palabra, guarda relación con el pensamiento a que puede dar lugar el propio reflejo del espejo.

“Pretendemos jugar con esa doble acepción: vernos reflejados y reflexionar”, añadió el comisario, quien puso igualmente el acento en “la mala relación de las personas con la imagen”, sobre todo en un entorno como el actual, en el que los milones de imágenes generadas a través de las pantallas móviles están provocando consecuencias muchas veces indeseadas a partir de deseos igualmente controvertidos.

“Lo que más atrae al público”, resaltó Del Campo, “es el juego con los espejos, porque, a través de ellos, conocemos”, destacando luego la sección dedicada a los caleidoscopios: “Es la que más sorprende”. Un caleidoscopio de imágenes que atrapa al espectador quizás, como apuntó el filósofo Gaston Bachelard, porque toda imagen tiene “un fondo onírico insondable” sobre el que “el pasado personal de cada cual pone sus colores peculiares”.