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Entrevista a Clara Bilbao (Premio Fashion Cinema 2024) y Rosario Puñales (diseñadora de moda y coordinadora de ‘Fashion Cinema’)
Festival de Cine de Alicante 2024
Museo de Arte Contemporáneo de Alicante (MACA)
Recientemente creada, la sección ‘Fashion Cinema’ del Festival de Cine de Alicante, cuya 21ª edición se llevó a cabo del 18 al 25 de mayo, empezó por primera vez en 2023 con un generoso refrendo y acogida por parte del público.
Seguramente, su éxito se deba al apoyo recibido por el director del festival, Vicente Seva, y por el gran trabajo realizado por Rosario Puñales, diseñadora alicantina, coordinadora del ciclo y que, además, es asesora de marcas del sector de la moda y docente de tendencias y diseño en varias escuelas de ámbito nacional.
Precisamente, en su primera edición, se otorgó el premio a Sonia Grande, demostrando que el objetivo de ‘Fashion Cinema’ es poner en valor el trabajo de diseñadores y diseñadoras de vestuario cinematográfico.
Con esta meta presente, se programó un ciclo de proyección de películas específico, además de conferencias, encuentros, talleres y exposiciones que tuvieron lugar en el Museo de Arte Contemporáneo de Alicante (MACA). Destacó, por ejemplo, la colaboración con la EASDA, en la que sus alumnos presentaron reinterpretaciones en papel de vestuarios de cine icónicos. También pudo disfrutarse de la muestra ‘Zapatos de película’, una colaboración con el Museo del Calzado de Elda que nos permitió sumergirnos en metrajes tan reconocibles como ‘Memorias de una Geisha’, ‘Titanic’, ‘Rocky’ o ‘La mujer de Rojo’, mediante sus inolvidables zapatos.
Este año se homenajeaba a Clara Bilbao, diseñadora y también directora, ganadora de tres premios Goya por su trabajo en diferentes películas y que recibió el Premio Fashion Cinema por su gran labor en el ámbito cinematográfico nacional e internacional.
Con motivo de la conferencia que la premiada ofreció, tuvimos la oportunidad de entrevistarla para ahondar en esa trayectoria merecidamente recompensada en el festival. Además, también charlamos con Rosario Puñales para interpelarla sobre los entresijos del festival y los motivos de creación de esta interesante sección.
Rosario Puñales: “Hay una diferencia muy grande entre la moda y el diseño de vestuario”
¿Cómo surge crear un ciclo como ‘Fashion Cinema’ dentro del marco del Festival de Cine de Alicante?
Surge con la necesidad de crear un altavoz para los técnicos de la parte de vestuario porque en los festivales de cine, normalmente, se agradece mucho a los actores, las actrices, los productores, los directores…, pero hay una parte importantísima que es el vestuario en el cine, que es de una riqueza brutal y merece un gran reconocimiento.
Mi formación es de moda y de tejidos, y me gusta mucho mi sector, pero adoro el cine. Aunque soy de Alicante, solo llevo un año viviendo aquí (he estado veinticuatro años viviendo en Barcelona) y, al volver, propuse crear esta sección de vestuario. Tuvo una aceptación muy buena y hemos continuado este año.
¿Crees que el diseño de vestuario se trata como algo secundario dentro de la industria del cine?
Pues sí. La verdad es que muchas personas le dan mucha importancia a la fotografía, a la luz, a la música… De hecho, tenemos un premio a la música en el festival de cine, pero el vestuario es una parte un poco olvidada. Creo que es por falta de educación, ya que cuando te explican una película (o cualquier otra obra de arte) se pueden apreciar todas las características, si te explican todo el conjunto. Así se valora y se agradece más la obra, ya que eres capaz de ver más cosas.
Ojalá se pudiera dar más información a las personas, que pudieran desmenuzar mucho más el vestuario para poder apreciar más la película y a quien interpreta el personaje. Por eso hemos creado esta sección y la hemos rodeado de todas las actividades circundantes, para que se valore justamente.
Eres diseñadora y también profesora; tengo entendido que haces mucha formación…
Sí, mi mundo es el textil. Soy profesora de tendencias y de color en escuelas en Barcelona. Mi sector es la ropa interior y el baño, así que nos movemos con el milímetro puro. Hay mucha precisión y por eso me gusta desarrollar esta parte. Somos muy tiquismiquis los de ropa interior.
Y desde esa formación docente, ¿crees que este tipo de actividades, como las que hacéis en ‘Fashion Cinema’, ayuda a que se conozca la importancia del diseño de moda o de vestuario fuera de su ámbito específico?
Sí, la idea es que aquí vienen personas que les encanta el cine y les encanta la moda… Aunque estamos hablando de vestuario aquí, tal y como me enseñó Sonia Grande, nuestra premiada del año pasado; nos enseñó que, evidentemente, hay una diferencia muy grande entre la moda y el diseño de vestuario. Son dos cosas absolutamente distintas; te pueden encantar las dos. Generalmente, a las personas que les gusta la moda, les gusta el vestuario de cine (aunque creo que, al revés, no ocurre tanto). Pero los que hemos estudiado moda, estudiamos historia y, al final, el vestuario nos atrapa bastante.
Cuéntanos un poco sobre el origen de las exposiciones que acabamos de ver en el museo.
Este 2024 es el primer año de colaboración con el Museo del Calzado de Elda. Para esta primera exposición hemos elegido once pares de zapatos –de un fondo que tiene el museo de veinticinco pares– que son réplicas de películas de cine. Son títulos imprescindibles, muy famosos y que están hechos por zapateros de Elda. De hecho, el que abre la exposición, el del filme ‘La mujer de rojo’, es de Magrit. Magrit es una marca de Elda, famosísima, que calza alfombra roja desde hace muchísimos años, y el propietario, Pepe Amat, estuvo en la mesa redonda ‘Calzando la Alfombra Roja, los Goya y otros eventos del cine’.
Hay otro par que pudo verse en la muestra que está inspirado en ‘Las mistades peligrosas’ o la réplica del calzado de ‘Titanic’, que no es el de la de la película, pero cumple las características exactas del zapato que llevaba la actriz. También tenemos ‘Vestidos elaborados en papel’, que están realizados por Rocío Ruíz y los alumnos de EASDA, de la Escuela de Arte y Diseño Superior de Alicante, por segundo año consecutivo, porque el año pasado hicieron los de Sonia Grande.
Siguiendo este criterio, este año decidieron hacer de la película ‘Teresa’, de ‘Blackthron’, ya que fue el primer Goya de Clara Bilbao, y de la ‘Sombra de la ley’, que también fue un Goya suyo. Creo que cuando Clara ha pasado por delante y los ha visto, se ha emocionado muchísimo. El año pasado, a Sonia también le impactó muchísimo.
Y la tercera exposición son los bocetos de Clara Bilbao, muchos de ellos son originales que incluso llevan la muestra de tela. Estos son los que tenía para ‘Nadie quiere la noche’, el metraje de Isabel Coixet, que fue su tercer Goya de vestuario. Queríamos mostrar estas tres exposiciones junto a los vestidos de Sonia Grande del año pasado, que constan de las reinterpretaciones del vestuario de ‘Niña de tus ojos’, ‘Midnight in Paris’ y ‘Mientras dure la guerra’. Como eran películas de Amenábar, y el año pasado también vino él a recoger el premio, así quedaba todo conectado.
Y en cuánto a las actividades, ya te he citado la mesa redonda ‘Calzando la alfombra roja’, a la que han venido los zapateros de Elda Pepe Amat y Joaquín Abellán, junto a Pilar Sanchís. También hemos tenido una charla sobre proceso creativo a través del vestuario, que nos ofrecieron Gustavo Adolfo Tarí y Darsy Mogica. Ambos nos trajeron sus diseños y nos contaron en profundidad su proceso creativo. Son mentes creativas increíbles que cogen materiales muy complicados, como metacrilatos, y los funden, y hacen diseños casi imposibles.
Y, por último, ¿cómo decidís a quién otorgarle el premio?
Pues, al ser un premio honorífico, si te soy sincera, era como escribirle la carta a los reyes. El año pasado, pedí contactar a Sonia Grande y se lo pregunté a Vicente [Seva]. Me llamó rapidísimo para decirme que Sonia vendría a recoger el premio y yo no me lo podía creer. Ella vive cerca de aquí y le fascinó que le llamaran para hacerle un homenaje y darle un premio en Alicante a alguien de vestuario.
La siguiente en mi lista era, por supuesto, Clara Bilbao, que también me hacía mucha ilusión y dijo que sí muy rápido. Era difícil para ella cuadrar agendas porque ha estado muy liada con su película y la presentación en el festival de Málaga, así que le agradezco mucho su presencia aquí.
Clara Bilbao: “El vestuario es una parte de las películas que tiene una carga narrativa fundamental”
Además de ser diseñadora, eres cineasta. ¿Cómo se produce el proceso de ir desde el diseño o la dirección de arte hasta dirigir una película?
He dirigido un par de cortos y una película que se ha estrenado en marzo de este año: ‘Tratamos demasiado bien a las mujeres’. Yo creo que cualquier técnico artístico que haga cine, y más durante treinta años, como es mi caso, su motivación final es la de contar historias. Un diseñador de vestuario lo que hace es eso. Además, el trato con los actores que he tenido para poder formar un personaje ha sido un entrenamiento gigante, que sirve también para dirigirlos.
Considero que la obra cinematográfica es la suma del trabajo de muchos técnicos, muchos de ellos artísticos. Precisamente, el vestuario es una parte de las películas que tiene una carga narrativa fundamental.
Me he pasado treinta años en un set de rodaje; he aprendido muchas cosas que en teoría no son de mi competencia, pero, en un momento dado, me he visto capaz de hacerlo y de aunar la visión de todos estos departamentos artísticos y técnicos para contar la historia que a mi me apetecía. Así que creo que un diseñador de vestuario tiene las herramientas narrativas para poner en pie una historia desde diversos ángulos de la película.
Desde tu perspectiva artística, ¿qué crees que aporta el vestuario a una película o a cualquier audiovisual?
En la vida, cualquier persona, con su indumentaria, se explica quién es o quién intenta ser. También quién no es, es decir, la forma de vestir explica muchas facetas. El lenguaje del vestuario es un lenguaje de signos, se podría estudiar si no fuera porque cada dos minutos cambian los significados.
Pero si en la vida normal el vestuario funciona como lenguaje, imagínate en una película. Muchas veces, los personajes tienen un texto y nosotros, vestuario, somos un subtexto de lo que ellos expresan. Hay diferentes maneras de que el vestuario hable; hay veces que hay que imponerse al texto y, otras veces, quedar por debajo de él, pero siempre reafirma los personajes. Es una especie de subtítulo invisible sobre esas personas que estamos viendo. Además, el cine es imagen y sonido, y nada sería sin la imagen. Imagínate cuantas películas serían distintas si el vestuario fuera distinto…
Por supuesto, aporta una gran ambientación…
Aporta, efectivamente, la ambientación. Te explica de los personajes en qué época viven, su estrato social, su estado anímico… También lo que quisiera ser y no son; te explica su capacidad de independencia, su personalidad más profunda. Incluso los que en teoría tienen poco datos o que el vestuario es muy simple o anodino, esto también cuenta. Creo que el vestuario es una lengua que habla por sí sola y en el cine es una herramienta imprescindible.
Centrándonos más en la actividad del Festival de Cine de Alicante y, en concreto, en ‘Fashion Cinema’, ¿qué grado de importancia concedes a la divulgación para que se valore el diseño de vestuario dentro del cine?
Estoy muy emocionada de que exista este espacio para hablar de diseño de vestuario, porque poner en valor nuestro trabajo es una lucha de los diseñadores en todo el mundo (aunque, quizá, en España algo más). Muchas vece, al vestuario no se le ha dado el valor que tiene; no se ha sabido la dificultad que conlleva, probablemente, porque es un trabajo de mujeres y porque nuestras madres nos han vestido toda la vida. Aunque también hay muchos diseñadores hombres; es cierto que, históricamente, son más las mujeres que hacen diseño de vestuario y parece que el trabajo de las mujeres es más fácil o es menos relevante.
Que en un festival como el de Alicante se haga un espacio dedicado solamente a esto me hace sentir orgullosa; más de mi trabajo, no como yo misma, no como Clara, sino como diseñadora de vestuario en España. Necesitamos poner en valor nuestro trabajo como un trabajo artístico, estamos peleando porque se reconozca nuestra autoría.
Una película no es igual si el vestuario lo hago yo o si lo hace otra persona; no es mejor ni peor, es distinto. Reivindicar la autoría es algo muy importante para nosotros en este momento, y me emociona que a alguien más que a los diseñadores de vestuario les parezca importante. Creo que es un gran punto de partida y el esfuerzo que se hace desde el festival es para aplaudir.
¿Cómo te sientes al haber recibido el Premio Fashion Cinema de este año?
Pues, lo primero de todo, me siento un poco mayor porque llevo treinta años en el sector, pero también me siento muy agradecida. Me produce mucha emoción, sobre todo echando la vista atrás… Entrando en el museo, he visto unas recreaciones de algunos vestuarios de mis películas hechos por alumnos de la Escuela de Diseño y casi se me saltan las lágrimas porque nadie me lo hubiera dicho hace treinta años. Ahora mismo, me parece que solo puedo dar las gracias y, desde aquí, intentar contribuir a que la función que tiene este evento sea cada vez más pesada en la industria y más importante.
