‘Dulk. Rondalla del fang’
Comisario: Fran Picazo
Centre del Carme Cultura Contemporània
Museu 4, València
Hasta el 17 de octubre de 2021
El artista urbano Antonio Segura “Dulk” trae al centro de València un pedazo de la Albufera con su exposición ‘Rondalla de Fang’, que acoge el Centre del Carme Cultura Contemporània (CCCC) hasta el 17 de octubre. Un muestra con estrechos vínculos con la Falla Municipal 2021, ya que Dulk fue también el encargado de diseñarla, por lo que se crea una conexión entre falla y obra por su forma y mensaje, en paralelismo con la condición efímera del arte mural.
En este ambicioso proyecto, Dulk presenta una suerte de relato onírico que combina literatura, música, arte plástico y pintura muralista, en la que el espectador será parte de este cuento fantástico y cercano que ha creado con una intención tan artística como de defensa del medioambiente, transportándonos a uno de los parajes naturales más bellos y relevantes de la geografía valenciana.
Para crear el ambiente de ensoñación y sumergir absolutamente al espectador, Dulk, utilizará todo tipo de recursos y materiales: desde un acompañamiento musical y sonoro hasta elementos reales propios de la Albufera, como tierra y redes de pesca. El artista ha querido contar con la ayuda y los testimonios de gente conocedora de primera mano del paraje valenciano, que le han servido para recrear con verdad y sentimiento la reserva natural, deformando la realidad y convirtiéndola en un pequeño mundo de fantasía.
Además, el artista urbano ha sido acompañado por otros autores como Mar Benegas, quien escribe la rondalla que hace de guía de la exposición y que los visitantes podrán disfrutar en sus móviles mediante un código QR situado en la entrada.
La exposición está dividida en dos salas contiguas y conectadas que dan sentido y forma al cuento valenciano que propone Dulk. Una primera sala, la del ‘1 %’, donde los muros se encuentran decorados con aves y el paisaje tan característico de la Albufera en tres momentos claves del día: amanecer, atardecer y anochecer, y en el centro de la sala una escultura en forma de oasis de tierra árida, en la que se encuentra un flamenco con la cabeza sumergida y rodeado por una serie de aves autóctonas defendiendo un pequeño pozo –que representa la minúscula porción de la superficie de la Albufera (1 %) que actualmente está protegida como reserva natural–.
La segunda sala nos sumerge en las profundidades de ese pequeño pozo protegido por las aves, donde se encuentra la fauna marina y evolucionan los graves peligros medioambientales a los que se enfrenta, representados, de nuevo, en la pintura mural y en el centro mediante la cabeza del flamenco en búsqueda de comida. Mientras, en los muros se representan peces que nadan y conviven con los plásticos y restos de redes que amenazan su ecosistema, adaptándose para no morir.
Con una relevante trayectoria internacional en diferentes campos relacionados con la producción artística –arte urbano, ilustración, moda o animación–, Dulk ha tratado de encontrar siempre su propio estilo y de buscar el tiempo para realizar obras con un mensaje sobre el peligro de la destrucción y el deterioro de nuestro mundo, reflexionando en estrecho compromiso con la naturaleza, instituida en fuente de inspiración y defensa a través de la crítica de los problemas ecológicos.
Un artista polifacético que sigue evolucionando y creando mediante obras oníricas y surrealistas llenas de detalles que pretenden contar historias donde los espectadores experimenten y saquen sus conclusiones sobre lo que ven, buscando las reacciones más profundas.
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