‘Es una lata el trabajar’, una comedia al ritmo de Luis Aguilé en el Teatre Talia

#MAKMAEscena
‘Es una lata el trabajar’
Texto y dirección: Jaime Pujol y Diego Braguinsky
Musica original y canciones: Víctor Lucas
Interpretes: Gisela, Naim Thomas, José Montesinos/ Tony River, Ana Conca, Óscar Ramos, Pau Vercher y Mamen Mengó/Nina Baifer
Teatre Talia
Caballeros 31, València
Hasta el 18 de abril de 2022

Hay poca gente que no conozca la figura de Luis Aguilé (Buenos Aires, 1936-Madrid, 2009). Hasta entre aquellos más jóvenes que no hayan tenido la oportunidad de verlo sobre un escenario, sus canciones resuenan como parte de la cultura popular. El Teatre Talía nos trae a València, hasta el 18 de abril, algunas de ellas con ‘Es una lata el trabajar’.

Titulada así por una de las canciones más emblemáticas del cantante, la obra nos cuenta la historia de dos hermanos, Óscar y Andrea (encarnados por Naim Thomas y Gisela), que han crecido en la fábrica de corbatas de su padre y que heredan tras su muerte. Óscar desea vender -ya que necesita el dinero cuanto antes- y Andrea se niega, decidida a continuar con el sueño de su progenitor. Con este enfrentamiento entre hermanos se entrelazan, además, altas dosis de diversión, sorpresas, unos toques paranormales, amor y mucha música.

Es una lata el trabajar. Luis Aguilé
Elenco de ‘Es una lata el trabajar’. Imagen cortesía de Teatre Talia.

Desde un primer momento, tuvieron claro que no se iba a contar la vida de Luis Aguilé. El compositor Víctor Lucas ha sido el encargado de la música para este montaje. “Era un reto bonito e importante, en la memoria de todo el mundo están las canciones de Luis Aguilé, es inmortal en todas las generaciones”, afirma.

Gran parte del trabajo de Lucas ha sido actualizar las míticas canciones de Aguilé y modificar los arreglos para traerlas hasta el siglo XXI, dándoles un aire mucho más pop. El resultado son unos temas magistralmente versionados e insertados en los momentos clave. Sin embargo, también ha rellenado con algunas canciones propias aquellos huecos en los que ninguna sintonía del cantante hispanoargentino encajaba en la diégesis.

Enredos argumentales de superación, amor, conflicto y corbatas extravagantes (cada cual más hilarante que el anterior) en los que Jaime Pujol y Diego Braguinsky, autores del texto original, introducen al espectador, entre ingeniosos empleos de recursos audiovisuales que acompañan a la representación, actualizándola y acercándola hasta nuestra vida cotidiana.

Desde YouTube hasta Instagram, las redes sociales tienen su aparición estelar en la narración. Elementos que constatan el trabajo de preproducción, desmontando aquello de que ‘Es una lata el trabajar’ y siendo sustituido por lo que más repite el estribillo: “La vida pasa felizmente si hay amor”.

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