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‘El rebaño. Cómo Occidente ha sucumbido a la tiranía ideológica’, de Jano García
Prólogo de Antonio Escohotado
La Esfera de los Libros, 2021
Sus ideas pueden convencer o no, despertar adhesión o rechazo, hacer reflexionar en silencio o suscitar acalorados debates. En la estela del pensamiento liberal, Jano García difunde una visión crítica y argumentada del momento que atravesamos, desde tribunas digitales -el programa ‘En libertad’ y el diario El Liberal- y también en varios libros.
Su último título, ‘El rebaño. Cómo Occidente ha sucumbido a la tiranía ideológica‘ (La Esfera de los Libros), lo iba a escribir conjuntamente con Antonio Escohotado, pero debido a los problemas de salud del filósofo, fallecido a finales del pasado año, este solo pudo firmar el prólogo.
“A García los ejemplos le brotan como racimos, sostenidos por líneas argumentales donde precisión e ironía se entrelazan fluidamente”, escribe Escohotado. “En este libro analiza el fenómeno inquietante por definición del momento, que es la reviviscencia del absolutismo en países enriquecidos tan sustantiva como manifiestamente por renunciar a él”.
‘El rebaño’, añade el filósofo, “muestra cómo por primera vez los movimientos antisistema están financiados por el propio sistema y cómo en muchos países -empezando por el nuestro- gobiernan los desprovistos de razón y lógica”.
‘Alogocracia’. Así define García el nuevo sistema de gobierno totalitario impuesto tras la disolución de las ideologías de derecha e izquierda en un magma moldeable, según los intereses de quienes realmente mandan.
Occidente ha renunciado a los valores y principios que le hicieron grande y en una deriva decadente asume la ‘alogocracia’, “una combinación letal que arrasa la razón y consigue hundir en el fango el debate intelectual para dar paso a la pantomima sentimentaloide. (…) El moralismo recalcitrante nos asfixia. (…) Hemos llenado el vacío espiritual de nuestra época con dogmas impuestos que apenas nos cuestionamos. (…) El vacío que nos ha dejado la religión lo hemos llenado con nuevas causas que otorgan sentido a nuestra vida. Dedicarse a salvar el planeta, a las mujeres, a los negros, latinos…”.
A lo largo del libro, García arremete contra lo que llama masas de acoso, “los encargados de promover la cultura de la cancelación, realizar presiones sociales y conseguir que muchos se apliquen la autocensura para seguir en el negocio”. También contra el feminismo como gran caballo de Troya, el racismo impostado y la, según él, farsa del cambio climático encarnada en la figura de Greta.
Muchos que comulgan con su ideario hallarán claves interesantes en estas páginas, que a otros muchos les pueden resultar afirmaciones indignantes y provocativas. Polémicas aparte, los argumentos de Jano García merecen ser escuchados en un debate racional, libre y abierto.
Habitamos un mundo tecnológico, sin embargo, en virtud de lo que llamas ‘alogocracia’ se impone un pensamiento único que apela a las emociones en vez de a la razón. ¿Cómo se explica esta contradicción?
Los algoritmos funcionan de una forma perversa. Te guían en la autoconfirmación a través de tus sesgos. Por eso, excepto que lo hagas tú con esa intención, apenas encontrarás información u opiniones que contradigan tus ideas presentes. Esto demuestra lo importante que es ir a una librería y llevarte unos cuantos libros sin que un algoritmo te dirija la compra.
El Estado proveedor ha sustituido a Dios y la idea de un futuro utópico en la Tierra a un paraíso en el cielo. ¿Esta dependencia no provoca cierta esclavitud?
Es el mismo mecanismo solo que con diferentes protagonistas. Ahora el Estado es el que te promete otorgarte el paraíso en la Tierra a cambio de que pagues muchos impuestos.
Divides la sociedad en terratenientes, pastores, perros y rebaño. ¿Por qué los perros se alinean con los amos?
Porque es más cómodo que alguien te dé la comida que buscarla por ti mismo. La sociedad actual se ha aburguesado –entiendo el término como acomodado– y ya no le interesa el esfuerzo, el sacrificio y el trabajo duro. Todos los imperios comenzaron su decadencia de esa forma. Nosotros no seremos una excepción.
¿Qué época de la historia se parece más a la que estamos viviendo, tal vez el periodo de entreguerras?
En cuanto a la visión totalitaria de la política social y económica, desde luego. Apenas nos cuestionamos nuestra vida sin que el burócrata de turno escogido por la masa ignorante meta sus zarpas en cuestiones económicas, sociales y, ahora, también sanitarias.
¿Qué opinas de la tergiversación del sentido de las palabras con el que se está pervirtiendo el lenguaje?
La perversión del lenguaje es terrible. De hecho, no tardaremos en ver cómo acusan de antivacunas a personas vacunadas con dos dosis solo porque no quieren ponerse la tercera dosis.
¿Se ha aprovechado el virus para crear un nuevo orden mundial basado en el control exhaustivo de la población, o tal vez el virus se creó para alcanzar ese fin?
Una banda de cortos mediocres es incapaz de organizar algo tan bien. Son simples aprendices de tiranos que han descubierto cómo a esta sociedad mediocre la puedes controlar contándoles que la muerte es inminente. Pasa con el cambio climático y pasa con la pandemia. Vamos a morir todos, pero, de momento, te quito tu dinero porque si aumentamos el gasto público podremos salvarte. Hay que sufrir algún tipo de deficiencia mental para comprar semejante estupidez.
¿Dónde están los intelectuales que alzaban la voz ante situaciones críticas?
Cobrando subvenciones del Gobierno.
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