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Cartel de la XIV edición de La Cabina
Festival Internacional de Mediometrajes de València
Obra de Jaume Mora
Colegio Territorial de Arquitectos de València
19 de octubre de 2021
Terry Gilliam, director de ‘Brazil’, se refirió al espíritu de su película realizada en 1985 como un cruce de Frank Capra y Franz Kafka. Es decir, una mezcla de vitalismo y atmósfera gris. Jaume Mora, que aludió al filme del director británico como uno de sus favoritos, se decanta por Capra, orillando a Kafka, en el cartel que viene a ser el escaparate de la XIV edición de La Cabina, Festival Internacional de Mediometrajes de València.
El autor de ‘¡Qué bello es vivir!’ planea en la ilustración de Mora, aunque solo sea por el hecho del carácter revitalizante que destila el cartel con cuatro jóvenes risueños asomándose por un palco orientado hacia las palabras ‘La Cabina’, cine de 30 a 60 minutos. Dejando atrás los espacios sombríos generados por la Covid, más próximos a los kafkianos universos de ‘La metamorfosis’ o ‘El proceso’, el artista valenciano deja que sea el aliento del público quien recupere el protagonismo del ambiente cultural.
“Es un homenaje tanto al público de este año como al del año anterior. El cartel celebra la vuelta del público a los cines”, subrayó Mora, durante la presentación del cartel de La Cabina en el Colegio Territorial de Arquitectos de València. “Cuando vi en su día el de [Jorge] Lawerta, ya pensé lo que molaría hacer el cartel de La Cabina. Y cuando me disteis la oportunidad, no lo dudé”, apuntó el creador, dirigiéndose a Sara Mansanet, directora del festival que, junto a él, desvelaba la imagen que encarnará este año el espíritu vitalista del festival.
Sinónimo de pasarla BIEN. 💙 Presentación del cartel de #LaCabina2021
— La Cabina Festival (@La_Cabina) October 20, 2021
¡Gracias a todas por asistir! pic.twitter.com/CxC0lRrQKi
Ahuyentando los fantasmas que todavía amenazan la realidad por culpa del coronavirus, Mora ha dejado a un lado cierta concepción ácida de la ilustración, para centrarse en su lado más amable. Diríase, siguiendo ahora al propio Kafka, que en lugar de utilizar el cartel como si fuera “el hacha que rompa el mar helado que hay dentro de nosotros”, ha preferido indagar en ese otro aspecto del autor de ‘Carta al padre’, cuando dijo que la juventud era feliz, porque tenía la capacidad de ver la belleza. “Cualquiera que conserve esa capacidad jamás envejece”, añadió.
Jaume Mora, que fue desgranando los pormenores de la creación del cartel y sus referencias artísticas tratando de despejar los balones que le lanzaba cierto nerviosismo escénico, aseguró que la inspiración le vino de las propias salas de cine, basándose “en la Filmoteca, por la tipografía y sus palcos”. “Miré los carteles de otros años para que el mío no fuera repetitivo y, a partir de ahí, me puse a dibujar, dibujar y dibujar”, resaltó quien se refirió a la aludida “Brazil’ como una de sus películas favoritas “por su universo futurista y surrealista”.
Los jóvenes diversos que aparecen en el palco de su cartel (“la diversidad intento tratarla en todos mis trabajos”) parecen, de hecho, mirar a cierto futuro optimista; futurismo que intenta, a su vez, sustanciar el surrealismo de una vida que La Cabina no deja de acoger bajo manifestaciones igualmente diversas en su programación del festival. Un ejemplo de lo cual pudo verse, después de la presentación del cartel, en el mediometraje ganador del Premio a Mejor Guion en 2020: ‘Masel tov Cocktail’, de Arkadij Khaet y Mickey Paatzsch, una mirada satírica sobre la sociedad alemana todavía dominada por los estereotipos en torno a los judíos.
El mediometraje sorprende por su tono desenfadado para acometer el tema de cierto antisemitismo larvado en la Alemania de nuestros días, que los directores subrayan con afirmaciones intercaladas en la narrativa a modo de pausas reveladoras. En una de ellas se dice: “El 29 % de los alemanes cree que sus antepasados intentaron ayudar a las víctimas del Holocausto, por ejemplo, escondiendo judíos. En realidad, menos del 0,1 % lo hizo”.
Volviendo al cartel de Jaume Mora, cuyos jóvenes salieron “de una amplia biblioteca que tengo de personajes dibujados en varias libretas”, el color, con amarillos y naranjas principalmente, y la composición, equilibrada con los rostros a un lado y la tipografía de las letras de La Cabina al otro, caracterizan una ilustración que invita al regreso a los cines. “No tengo ningún género artístico que me guste más. Lo que me gana más es el tratamiento de la fotografía o el color”, apuntó el artista valenciano.
‘La Cabina’, que debe su nombre al mediometraje homónimo de Antonio Mercero, coescrito con José Luis Garci y protagonizado por José Luis López Vázquez, celebrará el próximo año su XV edición, al tiempo que la película cumplirá 50 años. ¿Ha visto, por cierto, Jaume Mora ‘La Cabina’ de Mercero? “Sí que la conocía, sobre todo por mi madre, que la recuerda como un agobio de película”, concluyó Mora.
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