I Edición del Premio MAV Libro de artista
Presentación del proyecto
Ajuntament de València
14 de febrero de 2023
La asociación Mujeres en las Artes Visuales ha convocado la I Edición del Premio MAV Libro de artista con objeto de difundir lo mejor de la edición experimental generada por las mujeres artistas y fomentar la igualdad de género. El Premio cuenta con el apoyo de la concejalía de Acción Cultural del Ayuntamiento de Valencia, que promoverá́ la exposición de las obras premiadas en la Biblioteca municipal Carmelina Sánchez-Cutillas.
La convocatoria, que contará con ocho proyectos seleccionados, de entre los cuales se otorgará un Primer Premio de 1.500 € y siete accésits de 300 € cada uno, ha puesto el foco en la importancia de tener mujeres referentes en el sector de la cultura. El plazo de inscripción queda abierto desde el 15 de febrero hasta el próximo 7 de marzo, cuyas bases de participación se encuentran consultables en la página web de la entidad organizadora.
Un proyecto en coherencia con el desarrollo de los objetivos de MAV, que fue creada en 2009, para promover la igualdad de género entre mujeres y hombres en el sector del arte. Cuenta con más de 700 socias, de las cuales 97 se encuentran en la Comunidad Valenciana. Abarca diferentes ámbitos de las artes: artistas, investigadoras, galerías, comisarias, gestoras culturales y directoras.
La iniciativa se imparte desde la necesidad de seguir impulsando la visibilidad de la mujer en un sector cultural que sigue careciendo de equidad, una cuestión que sigue nervando a las mujeres del sector como a la propia Maribel Doménech, presidenta de MAV, que no tuvo pelos en la lengua para ejemplificar tal injusticia: “Cabe dejar en evidencia uno de los manuales más famosos de la historia del arte, como es el manual de Gombrich, donde no se menciona ni una sola mujer artista”, contextualizó.
La presidenta recalcó la importancia de elegir el libro de artista como medio elegido, ya que se trata de una de las formas de expresión artística con mayor libertad, pero también una de las menos conocidas. “Todos los artistas tenemos tenemos muy en cuenta en algún momento de nuestra vida desarrollar este formato”, reflexionó Doménech.
La naturaleza experimental del formato le permite a su vez a convivir en una biblioteca por su denominación de libro independientemente de su forma, por lo que desde MAV consideran la biblioteca municipal de Benicalap como el contexto natural donde la obra seleccionada debe coexistir.
“Queríamos apoyar esta iniciativa con ese eje fundamental, también aprovechando para dar a conocer qué es el libro de artista”, declaró en nombre de MAV. Una ocasión idónea para poner en diálogo los libros en un formato tradicional con la versión artística de las creadoras.
El libro de artista es una creación expansiva ya que puede ser desplegable, desmontable, transformarse en una expresión gráfica, o también en una expresión fotográfica. Un amplio abanico de posibilidades, atendiendo solamente a la forma, al que se suma la innumerabilidad de temáticas, tan infinita como la realidad en sí misma: “Yo pienso que tendrá mucho que ver con expresiones de género”, dedujo Maribel Doménech.
El reconocimiento a las bibliotecas municipales es la columna esencial del concurso de MAV que quiso aplaudir la puntuación de 7,6 que el barómetro municipal les ha dado, situándolas dentro de los tres servicios mejor valorados del Ayuntamiento de Valencia: “Consideramos que era un entorno muy interesante para conectar ese libro tradicional con el libro de artista”, explicó.
Las subvenciones contextualizan las acciones que el tejido asociativo no puede ejecutar de manera independiente, así se sentenció en nombre de MAV, desde donde es crucial dignificar la profesión artística: “Este primer premio nos ha llenado de ilusión sobre todo por las características únicas que tiene el poder desarrollar libros de artista sobre todo por mujeres. Además, nos parece muy importante participar con proyectos que remuneren el trabajo de las creadoras”.
Una visibilidad sigue situada en calidad de necesaria en un contexto en que el coleccionismo sigue presentando porcentajes brutalmente patriarcales: “El Reina Sofía contaba, el año pasado, con un 93% de obra masculina. Esa desigualdad es por la que luchamos. A ver si podemos pasar de un 7% a un 40%, como mínimo”, ejemplificó Doménech en nombre de un colectivo que lucha porque las distancias se sigan borrando.
Desde la organización, se remarcó la importancia de ejercer con transparencia este tipo de concursos, por lo que, tanto los criterios de valoración como los miembros del jurado compuesto por Elvira Rilova, Antonio Alcaraz, Mariángeles Pérez-Martín, Bernard Gaspard y Concha Ros, son públicos para todas las artistas interesadas en participar.
Las fórmulas desarrolladas a través del libro de artista pueden ejecutar políticas de activación de la memoria, pero también de lo cotidiano, lo étnico, los feminismos o incluso del amor. Algo así como un campo expandido de experiencias personales que pueden ser de gran interés y, sobre todo, de gran belleza.
