‘Gráfica creciente’, de Pepe Gimeno
Madrid Gráfica 2021
Imprenta Municipal-Artes del Libro
Concepción Jerónima 15, Madrid
Hasta el 5 de diciembre de 2021
La Imprenta Municipal-Artes del Libro acoge, desde el pasado martes 26 de octubre, ‘Gráfica creciente’, del artista y Premio Nacional de Diseño 2020 Pepe Gimeno, dentro del marco de la 5ª edición de Madrid Gráfica –promovida por el Foro de Empresas por Madrid, el Ayuntamiento de Madrid y DIMAD–. Una exposición formulada a modo de retrospectiva del trabajo del diseñador, junto con algunas de sus últimas obras, que cuentan con un carácter más orgánico.
‘Gráfica creciente’ se plantea como una serie de respuestas experimentales que Gimeno ha dado a determinadas necesidades planteadas por los clientes, cuya naturaleza de encargo va acompañada de una urgencia que no permite el desarrollo de un detallado proceso de experimentación: “Hay que ir con verdades sabidas y hechos probados”, asevera el artista.
Es esta cuestión la que impulsó al diseñador a realizar una investigación artística que le permitiera experimentar, siempre guiado por la curiosidad por conocer. Y así lo cuenta: “Este mismo trabajo que me exige dar respuestas, me formula preguntas”, una serie de interrogantes que siempre acaba resolviendo de manera original.
La muestra cuenta con diferentes secciones articuladas en torno al concepto de gráfica. Así, en primer lugar, encontramos una serie de carteles diseñados por el artista desde los años 80, en los que no se aprecia su propia mano, pues suponen un “popurrí de respuestas diferentes”.
Pepe Gimeno lucha aquí contra el concepto de “manual de identidad”, puesto que siempre antepone los intereses del cliente a cualquier tipo de marca personal. Vemos, por lo tanto, cómo cada cartel se adapta al mensaje que transmite, jugando con las tipologías, como es el caso del cartel textil cosido por Paula Sanz o de la dicotomía planteada en el cartel-instalación ‘Vivan los toros’.
Asimismo, se aprecian los diseños de marca de empresa –algunos de ellos premiados, como el de Sivaris– y sus anecdóticas historias, también representadas en ocasiones. Del mismo modo, también se muestra el desarrollo de la tipografía ‘FF Pepe’ y aquellos diseños que han sido destinados a ser iconos institucionales, como la palmera representada en el logotipo de Turisme Comunitat Valenciana o las figuras que componen el emblema de Corts Valencianes, en los que se aprecia cómo, a partir de una síntesis gráfica, se logran narrar una serie de complejidades.
Fue en 2002 cuando comenzó su proyecto ‘Grafía callada’, que da pie a la siguiente sección de la exposición, consistente en la presentación de un libro orgánico, despojado de toda gramaticalidad. El libro, realizado a partir de materiales que recogía de la playa, cuenta con toda su estructura formal: portada, índice, prólogo, etc.
Sin embargo, no se puede leer de la forma que acostumbramos, pues muestra, en esencia, la desnudez de las construcciones tipográficas, unos bloques de textos que, como afirma el autor, “no hacían referencia a otra cosa que a sí mismos. Allí, el signo y el significado eran la misma cosa”.
‘Grafía callada’ tendrá eco en el resto de obras posteriores de Gimeno. Un ejemplo de ello es ‘Diario de un náufrago’, que nos muestra un trabajo que gira hacia la reflexión sobre la semántica y el significado. Es un diario en el que recopila sus experiencias a partir, de nuevo, de materiales muy variados: plantillas de zapatos, redes y alambres. Todos ellos forman parte de esta delicada poética visual, que nos permite disfrutar de líneas, trazos y manchas, enseñándonos a mirar de una manera muy distinta a la que acostumbramos.
Por otra parte, encontramos los siguientes versos: “Decir sin hablar/ Narrar sin escribir”. Así comienza el ‘Manifiesto Emocional’ que da lugar a la siguiente serie de trabajos de Gimeno. Si en ‘Grafía callada’ encontrábamos la respuesta a la pregunta de “¿Se puede escribir un libro sin palabras ni letras?”, nos enfrentamos aquí otra serie de narraciones gráficas esencialmente formales que se resumirían en el lema ‘Sugerir antes que mostrar’. Gimeno crea un discurso para los sentidos, construido a partir de la ausencia, una ausencia de signos y de palabras, de cualquier elemento reconocible más allá de la propia forma.
Esta reflexión sobre el texto –o, más bien, la ausencia del mismo– se despega de su soporte en ‘Cartas a Man Ray’, un conjunto de esculturas exentas en las que, de manera similar a Man Ray, Pepe Gimeno mostraba la estructura de un poema. “Él tapaba y ocultaba, y yo descubría y dejaba abierto”, afirma. Estas cartas establecen un diálogo entre las obras de ambos artistas, una manera de compartir una misma experiencia desde un punto de vista muy distinto.
Siguiendo esta línea discursiva, llega ‘Grafía callada’, una pieza audiovisual realizada en colaboración con Sonia Megías. La idea surge a raíz del texto de Joan Cerveró para el catálogo de la exposición ‘Pepe Gimeno: Grafías Calladas’, llevada a cabo en el IVAM durante el verano de 2004; un texto en el que se reflexionaba en torno a la figura de Gimeno como un compositor, en tanto que selecciona materiales y los ordena en un espacio y tiempo concretos, de manera que da lugar a una pieza armónica que se puede entender como una lectura musical. Megías convierte su pieza en una partitura musical, con un código interpretativo que permitió a las tres voces del coro musicalizarla.
Por último, encontramos su trabajo más reciente, ‘Posverdad’, creación realizada durante la pandemia en la que el artista reflexiona en torno a la idea de posverdad enunciada por el filósofo A. C. Grayling. Cualquier concepto es susceptible de ser manipulado y es este el nuevo enfoque que ha otorgado Pepe Gimeno a su tratamiento del texto: vemos unos recortes de periódico deconstruidos y reconstruidos en un nuevo orden, sin sentido, pero aparentemente iguales a su versión inicial. Asimismo, apreciamos una idea presentada en un rótulo reproducido, fragmentado y resituado aleatoriamente. Este juego con la forma altera el contenido, formando ambos un ineludible todo en el que uno no existiría sin el otro.
Todo este conjunto de gráficas y de juegos entre forma y contenido, en los que está muy presente la idea de síntesis, da lugar al propio título de la exposición, ‘Gráfica Creciente’, que, tal y como explica Manuel Estrada, comisario de la muestra, “es creciente, porque todavía estamos seguros de que Pepe Gimeno nos va a seguir sorprendiendo muchas veces más”.
