#MAKMAMúsica | David Moliner
‘Tempus Liquidum’
Sala San Miguel
Fundació Caixa Castelló
Enmedio 17, Castellón
Sábado, 26 de febrero de 2022
El percusionista y compositor David Moliner actuó el pasado 26 de febrero en la Sala San Miguel de la Fundació Caixa Castelló. ‘Tempus liquidum‘ es el título de su performance musical, en la que interpreta e improvisa combinando la percusión de la marimba y el vibráfono.
David Moliner es un músico castellonense que estudió en la Universidad de Música de Ginebra, en la Universidad de las Artes de Berlín y en la Barenboim, academia musical alemana. Sus interpretaciones han viajado a oídos internacionales: desde México a Suiza, Francia y China, entre otros países. Es compositor de piezas para música de cámara y música de cámara teatral, para orquesta y mascaradas.
Antes de dar paso al concierto, David Moliner hablaba de que para él “es vital la parte expresiva”, que en la música se muestra a través de otros atributos inherentes a ella, como la armonía, la melodía, el timbre o la textura. Moliner propuso al público que liberara la mente para entender las interpretaciones de la segunda mitad del concierto, piezas marcadas por la improvisación, y deseó que los asistentes pudieran averiguar en ellas un “universo inesperado”.
El músico abrió con un homenaje a Bach, tocando la ‘Sonata II en la menor’ para violonchelo, transcrita por el propio David Moliner para su interpretación en marimba. Los golpes sobre la madera se convertían en un incesante goteo de notas, que fluía en perfecto orden en cada movimiento de la pieza. Moliner bromeaba: “Lástima que en la época de Bach no existía la marimba”.
En la segunda parte de la actuación, el músico ejecutó una pieza original, así como otras obras de Josep Soler, Stockhausen, José Manuel López López y Debussy, en unas versiones que se abrían a la improvisación. Principalmente, se sirvió del vibráfono, aunque intermitentemente también entraba en diálogo con la marimba. Estas interpretaciones, más propiamente performativas, llamaban al espectador a un viaje subjetivo hacia las lindes del pensamiento. Las tensiones que Moliner creaba entre las notas dibujaban un equilibrio musical entre dos mitades y su interpretación evocaba un camino deslizante a través de un cuento de fantasía.
El motiv de la clásica ‘Arabesque II’, de Claude Debussy, se articulaba perfectamente en esta aventura sonora. Con dos baquetas a cada mano, el músico jugó con la intensidad, la tensión y el brillo para moverse desde un suspense inicial a una melodía más cándida y agridulce, que se extinguiría satisfactoriamente en una nota solitaria. El espectáculo fue doblemente aplaudido en la pequeña y acogedora sala de la Fundació, cuyo espacio había sido colmado por el público, tanto joven como mayor.
‘Tempus liquidum’ bebe de conceptos eminentemente baumanianos y refiere una reacción al posmodernismo más gaseoso de una sociedad que viaja a ritmo trepidante en sus procesos y posibilidades; un diagnóstico que avanzaba el escritor y pensador Zygmund Bauman hace más de 40 años.
Desde Fundació Caixa Castelló explican sobre la performance que es “una mirada retrospectiva que nos conduce desde el modelo modernista al metamodernista, nos invita a pensar en la devaluación paradigmática de los conceptos de solidez constructivo-orgánica…, convirtiéndonos en miradas esotéricas de nuestra subconsciente realidad”.
David Moliner publicó su último disco, ‘Physical Sound’, en diciembre de 2021, un álbum que lanzó el sello discográfico alemán NEOS y que, dentro de la música contemporánea europea, pone de manifiesto esa cualidad expresiva a la que aludía el mismo compositor. A través de las sensaciones, sus piezas nos permiten leer en la esfera de la abstracción.
La estética compositiva de David Moliner ha sido impartida en talleres de varias universidades europeas, así como en Estados Unidos. Tras este concierto en su ciudad natal, el músico actuará próximamente en Madrid y Suiza.